No cabe duda, Diablo Immortal es un título ha nacido para ser el centro de polémicas y controversias. Desde su presentación en la Blizzcon de 2018, Diablo Inmortal ha dado mucho de que hablar y hoy, no va a ser excepción. Los fans de Diablo están horrorizados con las microtransacciones presentes en el juego y en consecuencia, han manifestado su disconformidad de una forma bastante notoria.
Basta con echar un breve vistazo a las publicaciones dedicadas a Diablo Immortal dentro de Reddit y ver el aluvión de críticas al que se enfrenta este ARPG. En dichas publicaciones, muchos jugadores afirmaron abandonar el juego debido a la monetización tan agresiva que tenía el juego. Otros usuarios sin embargo, han intentado jugar gastando solo lo mínimo y necesario.
En todo caso, esta oleada de ira tiene un punto en común y eso es las mejoras de las gemas legendarias. Esta parte de Diablo no se deja muy clara a los jugadores cuando suben de nivel por primera vez y además, es el ejemplo más claro de lo que es un pay-to-win (lo que significaría ”pagar para ganar” o también para obtener ventajas muy grandes).
Tal y como informó el medio GameRant, subir de nivel a un personaje en Diablo Inmortal nos puede costar la friolera de 110.000 dólares y es todo gracias al sistema de gemas. Al mejorar las gemas, estas nos proporcionan estadísticas superiores y mejores puntuaciones en combate, elementos que afectan en general a tu rendimiento dentro del juego. Si decides pasar por caja, podrás evitar el esfuerzo que supone lidiar con las gemas y ganar puestos en las tablas de clasificación de los servidores.
El diseñador principal de Diablo Immortal, Joe Grubb, dejó claro en una entrevista que se realizó para VG247 que ”todos los sistemas de juego principales de Diablo Inmortal son gratuitos. Eso incluye la historia principal, las mazmorras, la incursión en el infierno y el ciclo de lucha en el juego. Puedes hacer todo en Diablo Inmortal completamente gratis.” Siendo esto cierto, eso no quita que varios aspectos del juego han sido truncados para favorecer un sistema de microtransacciones un tanto agresivo con sus jugadores.
